4 de noviembre de 2015

Tu carne es la memoria
y tu rostro el giro de la luna,
Tienes un nombre de tanto repetirlo.

Deja que tus huesos sean agua,
que tus cabellos se abrasen
en el fuego de la creación.

Tu carne es la memoria
y tu rostro el giro de la luna,
tu corazón es un ancla de las eras.

Eres la ardilla en la rueda,
eres el Atlas del conocimiento,
eres el esclavo de tu condición.

¡Liberate! ¡Despierta!
deja que tus huesos sean agua
recién nacida y pare,
como la madre naturaleza,
el hijo de ti mismo.